Cuando Dios disciplina a sus hijos

Resumen del sermón

En este texto claramente tenemos dos exhortaciones: 1ª Que no debes menospreciar el castigo de Dios. 2ª Que no debes fatigarte del castigo de Dios. Entonces si Dios nos castiga, es para instruirnos, para corregirnos. No nos disciplina como juez, sino como Padre que nos ama. No es que Dios nos castiga como paga por nuestros pecados. Los castigos no nos limpian del pecado. Piensen entonces del gran castigo que nuestros Señor Jesucristo sufrió en la cruz!! Cristo sufrió todo el castigo real que merecían nuestros pecados y por eso Dios nos perdona y nos acepta.

Acerca del autor

El pastor Paco Orozco nació y creció en México en una familia Católico Romana nominal. El Señor lo salvó cuándo era un niño y unos vecinos lo invitaron a su Iglesia. Estudió para el ministerio en la universidad de Bob Jones en los Estados Unidos. Por los últimos treinta años ha sido pastor de la Iglesia Bíblica Monte Horeb en la ciudad de Hermosillo, Sonora, México.

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